¿Cual es el futuro del libro?

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Bob Stein

Para quienes han experimentado el placer de leer un libro, ese acto personal e íntimo de abstracción, gracias a las ideas inéditas que un escritor plasmó luego de un intenso trabajo creativo; podría parecer imposible que el libro tal y como lo conocemos ahora vaya a desaparecer, y más aún que nuestra forma de leer y escribir cambie drásticamente. Para Bob Stein, investigador estadounidense, pionero de los medios interactivos y director del “Instituto para el Futuro del Libro”, el desplazamiento de los libros impresos es su destino inevitable y con el tiempo se convertirán en objetos de arte, raros y valiosos que sólo se encontrarán en museos o bibliotecas. Invitado por Fundación Telefónica y Alta Tecnología Andina, Stein llegó a Lima para ofrecer la conferencia “Documentos análogos/documentos electrónicos: la evolución de la lectura y escritura en la era de las redes”, en la que planteó la consolidación del libro digital como una herramienta que transformará nuestra forma de pensar. Stein plantea que hoy en día la lectura y la escritura son acciones solitarias y la discusión en torno a ellos se circunscribe a pequeños y privilegiados círculos sociales. Sin embargo, a medida que la lectura y escritura se trasladen del soporte impreso a las pantallas de dispositivos móviles en la red, los libros se convierten en “lugares” donde se realizará un debate social más activo. De acuerdo con sus teorías, la manera como se realiza la edición de libros, los derechos de autor y la comercialización de publicaciones, cambiará radicalmente y será necesario buscar formas creativas de enfrentar esos cambios. Sobre el destino final del libro, las nuevas formas de lectura y escritura social, los riesgos y ventajas que estas conllevan, diario16 conversó con este visionario de la escritura y el libro electrónico.

– ¿Qué es lo que investigan en el Instituto del Futuro del Libro?

La fundación Mc Arthur me pidió que retomara la edición de publicaciones pero esta vez para internet, entonces les pregunté qué significaba ser un editor para internet. Lo que había hecho antes era electrónico, como CDs, DVD, pero nada de internet. Entonces les pedí que me dieran presupuesta para investigar y tratar de entender de qué se trataba eso. Así nació el Instituto para el Futuro del Libro donde tratamos de entender como está cambiando el discurso en el traslado de contenidos de la página impresa a la pantalla en la red. Luego de cinco años creo que entendimos el problema, cuál era la función central de un editor en el futuro. Vimos que además del trabajo tradicional de un editor, también se tenía que construir una red social, porque en la era de internet la gente no sólo pagará por el contenido de un libro, sino también por la posibilidad de pertenecer a una comunidad de contactos.

– ¿El libro impreso como lo conocemos tiene futuro o está destinado a desaparecer definitivamente?

No, se convertirá en un objeto de arte. El escritor peruano Mario Vargas Llosa dijo que el libro iba a desparecer en el futuro y yo estoy de acuerdo.

– ¿Cuando se creó la radio o la televisión también se dijo que los diarios desaparecerían, pero todavía hay muchos diarios y revistas en el mundo?

Entonces la gente estaba equivocada, pero eso no significa que el rol del libro va a seguir permaneciendo igual. Cada día hay menos periódicos en los Estados Unidos porque la gente está leyendo diarios electrónicos. Podemos preferir leer periódicos en papel, pero también es cierto que son caros y no queremos pagar por ellos.

– ¿En ese cambio en nuestra forma de leer un libro en papel al digital, se pierde esa experiencia personal de abstraerse e imaginar lo que se lee?

Antes la poesía solía ser una de las principales formas de expresión. Ahora también tenemos poesía pero no está en el centro de nuestra expresión. Creo que siempre van a existir personas que quieran expresarse utilizando la manera más simple de abstracción con las palabras. Hoy en día están naciendo niños en Lima que podrán más adelante expresarse a través de videos, códigos y toda la multimedia de la manera más natural, así como las palabras lo son para ti ahora. Lo importante es lo que tú valoras, tendría que verse la manera como se mantiene eso, no solamente con una página impresa.

– ¿No pueden convivir los libros con el internet, las redes sociales y el libro electrónico, no hay espacio para todo?

Los medios impresos son un lujo que no todos pueden pagar. Yo adoro tener un libro en las manos, lo valioso es que ese libro me hace tener una idea, pero también es importante para mí poder hacerle un seguimiento a esas ideas. El libro impreso crea una burbuja a nuestro alrededor, pero el libro electrónico crea una ventana al resto del mundo. No se trata acá de que tú tengas la razón y yo esté errado, sino que las dos visiones son validas.

– ¿Con esta forma interactiva de leer y escribir un libro no se corre el riesgo de tener una producción superficial de contenidos?

Si, definitivamente, pero también existe el riesgo de que las ideas se queden encerradas en un libro al que solamente los expertos tienen acceso. Las respuestas a esas preguntas no son cuestiones técnicas, sino son fundamentalmente sociales. La tecnología tiene una manera de existir y un camino, un derrotero, pero los seres humanos tienen la capacidad de preguntarse hacia donde están yendo y confrontar la realidad.

Pero son muy pocos los que se cuestionan eso, incluidos los gobiernos…

Nosotros vivimos en sociedades capitalistas donde hay muy poco espectro para mirar, lo ideal que deberíamos buscar es una perspectiva mucho más amplia. El problema es que la sociedad hace que veas muy poco, cuando en realidad deberíamos ver mucho más ampliamente.

– ¿Cómo se va a abordar la problemática de los derechos de autor?

La intención original de los derechos de autor era que una persona que tenía una idea original podía tener los derechos sobre ella por un tiempo y luego pasaba a ser propiedad de la humanidad, es decir en un plazo beneficiaría a todos. Ahora se ha cambiado esa idea y en realidad los derechos de autor buscan enriquecer al autor, pero más específicamente a las compañías que poseen sus derechos, como Disney o alguna productora musical.

– ¿Quiere decir que no habrá ideas originales sino que todo será libre y parte de un devenir social?

Creo que nuestro sentido de privacidad está cambiando, los chicos están creciendo en público, en facebook. Hace 500 años cuando se vivía en villas pequeñas, todos sabíamos la vida de todos. Nuestra manera de ver las cosas es muy estrecha, pero ahora se está ampliando.

http://diario16.pe/entrevista/49/bob-stein

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