DOS PREGUNTITAS SEÑOR CHANG

Por: Wilter Aro (*)

Luego de la evaluación para nombramiento y que solamente 151 lo alcanzaron, era la oportunidad para muchos de liberar la fobia escondida hacia el maestro. Con expresiones como: vergüenza nacional, recibió de su propia medicina, desastre magisterial, ¿estos son los maestros para nuestros hijos?; demostraban además del odio oculto, el desconocimiento sobre EVALUACIÓN DOCENTE por el ánalisis superificial y aislado de este proceso, y expulsaban quien sabe la ira por el daño provocado por algún «maestro».


Si revisamos los antecedentes, no es descabellado presumir que los resultados tenían que terminar así o en lago parecido. Veamos: desde antes de la última Huelga magisterial (2007), y después de ella, el Ministro Chang – el más impetuoso – se dedicaba al estilo de un psicosocial (para encubrir los exhabruptos gubernamentales (lease TLC, alza de precios de los productos de primera necesidad, etc) y la crisis Congresal (Canchaya y Tula Benites) , para lanzar expresiones ponzoñas hacia al maestro, a tal punto, que al mismo estilo hitleriano, el propio Alan García, nos llamó simplemente, comechados. Pero también, el resultado evaluativo es un indicador fuerte sobre el nivel formativo – profesional de nuestros docentes en los claustros pedagoginos o universitarios, además por supuesto, del letargo intelectual luego de adquirido el título profesional, situación que no es ajena a ninguna profesión.


Mientras que en un lado de la mesa, el expulsado Ministro Chang, /
echado por sea caso, por deficiencia académica/ de la Universidad La Católica; y en el otro lado, el hortelano mayor, celebran norteamericanamente del «fracaso magisterial, como celebrò Bush cuando Fidel Castro se enfermó gravemente;». Acá en el otro lado, «muy lejos de Lima» – el dolor continúa, los maestros sometidos al examen del 9 de marzo, los que para el gobierno «no aprobaron» la prueba ESAN, sientan hasta ahora el resquemor, presuman que ojos lastimeros estén sobre él /ellas, sufran el decaimiento abrupto en su autoestima y defiendan con uñas y dientes, ese céntimo de punto con lo cual pueden llegar a cinco (05) /caso San Martín/ y ser contratados, aunque eso tenga como costo, la división magisterial, el avasallamiento a su propio colega, situaciones lamentablemente avalados por algunos «fronterizos» Secretarios Generales Provinciales del SUTE, que están mirando sesgada y hasta mezquinamente esta viacrucis de contrato docente.


Otros, los del rango 11 -13, «los que aprobaron»; ya se conformaron y aceptan orondos su resultado como un inmenso logro. Una profesora trujillana quien obtuvo 15, con notoria pedantería, da recetas para la solución a la crisis de la educación peruana, siendo su primera receta, la extinción del SUTEP. ¿curioso no?


Lo real es que solamente estaba normado nombrar y contratar a partir de nota 11. Los contratos a «desaprobados», los que no alcanzaron el parámetro establecido por una antojadiza evaluación mutilada y parapléjica; debería haber quedado a la decisión del Gobierno Regional para una Evaluación Regional o en todo caso a ser evaluados por los CONEIs de cada institución Educativa. Pero no se hizo así, y las consecuencias son conocidas y muy lamentables.


No pretendo cegarme ante estos resultados, pero considero, que ninguna de las reacciones de los docentes «aprobados o desaprobados» son correctas ni adecuadas. Con ello están reflejando la carencia informativa sobre la significancia real y el desconocimiento de la naturaleza multidimensional de una VERDADERA EVALUACIÓN.


Con razón León Trahtemberg, ante la evaluación censal aplicada al maestro en enero y que ni el mismo pudo desarrollar, señalara: «si se quiere contar con gente que razone y sea creativa, se diseñará un examen que detecte esas habilidades. Si se desea seleccionar gente memorista que tenga una enciclopedia metida en la cabeza, se le hará rebuscadas preguntas académicas que sólo el intenso memorismo o el azar permitirá contestar«.


Se entiende entonces que un conocimiento asumido friamente, linealmente, digamos dogmáticamente; sólo sirve para enlucir la memoria, más no es garantía de éxito en la relación de interaprendizaje docente – estudiante, menos será en el real debate de las ideas orientado a la formación de gente pensante, crítica y creativa, que tenga como misión transformar esta realidad para volcarlo al servicio de los más necesitados.


Reitero que, faltaría a la verdad y a la realidad si asumiendo un falso espíritu de cuerpo, intento soslayar y con ello tácitamente desconocer en líneas generales la crisis formativa del docente con y sin aula, pues seguramente al aplicarse similar prueba al magisterio en servicio, tengamos también similares resultados. Pero también se faltaría a la verdad y a la realidad, si es que conscientemente o no, unilateralicemos el análisis y endosemos la responsabilidad de la crisis de la educación al maestro, en represalia a los magros resultados de una «evaluación mutilada y parapléjica«.


Actuar de esta manera es hacerle el juego gratuito al gobierno actual, es esconder la responsabilidad de los gobiernos anteriores y de los que vendrán. Es desconocer peligrosamente la historia de la educación peruana, es tomar partido por las ideas malébolas de Chang, del Castillo, Martha Hildebrant y del propio hortelano mayor, quienes al estilo potteriano, identificaron al culpable de la crisis educativa peruana. Es decir, el maestro como el gran chivo expiatorio.


Si esto sigue así, pronto estaremos asistiendo al enrostramiento hacia los médicos, abogados, ingenieros, etc. para que cuando protesten al igual que los maestros por mejores condiciones sociales, profesionales y laborales, simplemente te manden a estudiar y tengan a la población a quien desde hace buen tiempo han venido trabajandolo con psicosociales, como el aliado inconsciente.


El gran peligro, en el caso particular del magisterio, es que sutilmente nos están conduciendo a romper la unidad maestro-maestro, maestro – estudiante y maestro – padre de familia, es decir a aislarlo al maestro de su propia comunidad, a hacerle sentir forastero en su propia casa. Mientras en otros países como Cuba, de quien hasta los más incrédulos recién reconocen las bondades de su educación, este trinomio es la razón de su calidad educativa, impulsado obviamente desde el propio estado. Allá el estado suma, aca nos divide.


Felizmente, el panorama sobre los resultados de evaluación al magisterio desempleado se viene aclarando dado al análisis correcto. Los más notorios entendidos en la educación, coincidieron en la intención nefasta hacia el magisterio peruano de la evaluación chang-esan. No se descarta que, dado al odio histórico del APRA al SUTEP, la intención encubierta fuese desprestigiar al magisterio.

Lo científico es que ninguna evaluación puede estar dirigido al maltrato, es decir a lo punible.


Es muy seguro, que si se encomienda a las Facultades de Educación de las Universidades representativas del país, la estructura de la evaluación sería otra: más real, más pertinente al quehacer educativo, más contextualizada, más sistémica, más compleja (no digo complicada), en otras palabras, mas educativa. Lo desventajoso es

la gran capacidad de filtración. Los técnicos de la ESAN están lejos de entender la esencia de la educación.


Deseo cerrar este artículo haciendo dos preguntitas al Ministro Chang como Ingeniero Industrial, no como pedagogo, podría ser una masacre. (
10 puntos cada uno)

1. ¿Cuál es el principal procedimiento a realizar para la industrialización óptima de la shapilloja?

2. ¿A cuántos grados celsius debe someterse una mezcla de esencias de poloponta y witino, para que se apto al consumo de los diabéticos.


Si por sea caso uno de ellos te resulta complicadito, tienes esta pregunta alternativa:


3. Acudiendo a los principios de la mercadotecnia, ¿cuáles serían los niveles de aceptación o rechazo de la población limeña hacia la shicashica?

¿Me dices que no se malo?, ¿quieres alternativas?, ¿Te voy a jalar?. Bueno tú eres Ministro de Educación. Tienes 3 años para resolverlas, no 3 horas.

La respuesta en el próximo artículo.

wilteraro@yahoo.com

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