Los conservadores de hoy son los conservadores de ayer
Teresa Tovar Samanez
La manera cómo hoy se menosprecia a las personas por su orientación sexual para negarles sus derechos no se diferencia mucho del modo y términos con que tiempo atrás se injurió y mancilló la dignidad y derechos de las mujeres, judíos, negros esclavos, indígenas y personas con discapacidad, todos ellos colectivos marginales a la sociedad.
Vea si no cómo se estigmatizaba a estas personas desde hace centurias hasta el siglo pasado, denigrando su condición humana: a) “Son seres humanos defectuosos”; b) Son seres humanos deficientes, originados sin intención”; c) “Son resultado de una degeneración física del ser humano”; d) “Su deterioro biológico es prácticamente irreparable”; e) “No son seres humanos completos; f) “No se les considera seres humanos”. Son frases de Aristóteles, Platón y Tomás de Aquino, sobre la mujer, de los políticos esclavistas de EEUU sobre los negros, de los nazis sobre los judíos, homosexuales y personas con discapacidad y de Alejandro Deustua sobre el indio. Trate de adivinar cuál frase corresponde a quién, y no podrá.
Asimismo, antaño también se acusaba de pecado a lo “diferente”: a) “No son seres humanos. Son salvajes sin Dios”; b) “Son seres histéricos, dominados por la pasión y el pecado”; c) “Están sumidos en gravísimos pecados contra la ley natural”; d) “Son malditos de Dios”; e) “No viven conforme a la razón natural y tienen malas costumbres”; f) “Son seres poseídos por el demonio y otros espíritus infernales”. Son frases de antiguos republicanos españoles sobre la mujer, de Sepúlveda y sacerdotes de la conquista sobre los indios y negros, y de religiosos de siglos pasados sobre las personas con discapacidad. Intente de nuevo adivinar.
También se argumentaba que perjudicaban a la sociedad: a) “Son pobres portadores de los males de la sociedad”; b) “Son la desgracia del país”; c) “Son un agente infeccioso y desintegrador”; d) “Darles derechos llevará al estancamiento y la paralización de todo progreso”. Son frases de nazis, médicos y congresistas de la edad “moderna”.
Actualmente, si bien sin tanta crudeza, el mensaje respecto a las personas LGTB tiene el mismo objetivo de arrinconar a seres humanos a una vida con menos espacios y derechos: a) “Contraría el orden natural… atenta contra la dignidad humana”; b) “Va en contra de las buenas costumbres y contra la humanidad misma”; c) “Tienen una inclinación opuesta a lo natural y por tanto defectuosa”; d) “Están fuera del plan de Dios”; e) “Ante Dios es abominable lo que hacen”; f) “Menoscaba el más sólido fundamento de nuestra sociedad”. Son frases de a) y f) de la Conferencia Episcopal Peruana, b) del Padre Quispe (Ayacucho), c)de la web ¨Formación Católica”; d) del congresista J. Rosas; y e)de las iglesias evangélicas.
Aún se sigue luchando por estos colectivos y hay algunos avances: se abolió la esclavitud, las mujeres consiguieron el voto y acceso a la educación, Mariátegui reivindicó al indio, y tenemos leyes que amparan los derechos de las personas con discapacidad. Falta conseguir la plena ciudadanía y dignidad de las personas LGTB.
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