Perú: Salgado no es el mal menor

Claudia Cisneros

Ante el fujimorismo no se puede bajar la guardia. Quien conoce su oscura trayectoria –de la que no han deslindado– sabe que es y sigue siendo un peligro para el país. Bajo la apariencia de partido político, el fujimorismo congrega delincuentes probados, encarcelados, procesados y en investigaciones que van desde el asesinato, lavado de activos o sospechas de vínculos con el narcotráfico, y, por supuesto, el mal común de gran parte de su cúpula de ayer y hoy: la corrupción, complicidad o anuencia con ella. Chacones, Ramírez, Fujimoris y demás contraejemplos del político, integran esta “propuesta delictiva” (César Hildebrandt: http://goo.gl/QnGTMM ).

¿Por qué no dejar el pasado en el pasado?, preguntan algunos despistados y otros cómplices. La respuesta es simple: el fujimorismo es aún una amenaza para una convivencia democrática porque jamás ha abjurado de los crímenes y delitos cometidos por sus integrantes, dejando en claro que la justicia –ayer y hoy– como castigo a la transgresión de reglas, no aplica para ellos. Mientras sigan justificando su pasado, su reputación democrática siempre estará en duda.

Por eso, adjudicar a Luz Salgado la categoría de mal menor como presidenta del Congreso porque “es lo más conveniente para PPK” o “es lo mejor que tiene el fujimorismo”, es abdicar al derecho ciudadano de exigir más a la política. En el análisis del político, cuya forma de operar es la negociación, pueden darse estas “justificaciones”. Pero los ciudadanos no debemos claudicar a exigir lo mejor, y no lo peor o menos nauseabundo de lo hediondo. El ciudadano o activista debe exigir del político más de lo que la real politik quiere imponer. Defender y aspirar al deber ser más que al simple ser.

Luz Salgado no solo fue muy cercana a Montesinos, según su confesión aquí https://goo.gl/vzTiu1 y reunión en el SIN acá https://goo.gl/SBVvOM (en la que queda claro el grado de confianza y coordinación); también recibió, según Montesinos aquí https://goo.gl/GzsB4a, 20 mil dólares sabiéndolos robados del Estado para su reelección, y para seguir ejecutando las órdenes de la corrupción fujimorista. En este ilustrador e histórico video de 1998, del minuto 1:30:14 a 1:32:52 https://goo.gl/u6VPrH, Salgado y la bancada fujimorista reciben instrucciones de Montesinos para seguir controlando el Poder Judicial, el Ministerio Público y el Consejo Nacional de la Magistratura ¡hasta el año 2005!

¿Alguna vez Salgado, de ese viejo corrupto fujimorismo de ayer y hoy, dijo arrepentirse de ser cómplice de la captura ilegal del Estado, o que nunca debió permitirlo y que jamás justificaría ese “democracidio”? No, y es improbable que lo haga. Porque el fujimorismo vive del relato mentiroso que ha construido para esconder que depredaron el Perú, económica, legal y moralmente. No tienen voluntad de enmienda porque aspiran al poder como forma de privilegio, sustento económico y engañifa populista. Entonces, la próxima vez que alguien pregunte por qué seguir siendo críticos con el fujimorismo, la respuesta es simple: porque siguen siendo y defendiendo los contravalores sobre los que construyeron su asociación para delinquir y capturar el Estado, y porque mientras no abjuren de ello siempre serán una amenaza para el Perú.

http://larepublica.pe/impresa/opinion/786229-salgado-no-es-el-mal-menor

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